Como un fantasma del pasado, regresas cada vez que creo que por fin te he olvidado, siempre la misma historia, de nuevo ese sentimiento. Cansada de intentar negarlo, de autoconvencerme de que te he olvidado, pero al mismo tiempo sintiendo que es un error, que nuestro tiempo ya pasó y que las segundas partes nunca fueron buenas.
Como un fantasma del pasado, me miras de un modo especial y me hablas con tu peculiar tenacidad, no se si ya es la imaginación la que me juega malas pasadas, creyendo cada una de tus palabras, diciéndome que esto no será como la última vez, que hemos cambiado y que este sí es, precisamente, el lugar y el momento adecuado.
Que ingenua, pensando un mundo imaginario, un mundo donde tú no fueses un fantasma del pasado.
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